La presencia de Isabel en la Novena del Niño Jesús se conecta con su papel en la historia de la Anunciación y su relación con María, la madre de Jesús. En el contexto de las celebraciones navideñas, Isabel puede ser vista como un símbolo de fe, esperanza y alegría, ya que fue testigo del milagro de la encarnación y compartió un momento clave en la preparación para la llegada del Salvador.

San José: Esperar es confiar; José desempeña un papel fundamental en la Navidad, representando humildad, obediencia y fidelidad al plan de Dios.
San José es reconocido como el patrono universal de la Iglesia, y su figura se destaca en los pesebres navideños como símbolo de amor paternal y fidelidad divina.

MARÍA: Madre de la esperanza; La presencia de la Virgen María como Madre es una de las manifestaciones más hermosas del amor divino en la vida cristiana. María, madre de Jesús, es modelo de fe, humildad y entrega, y su maternidad trasciende más allá de lo biológico, convirtiéndose en un símbolo universal de cuidado, protección y amor incondicional.